Descripción
lavanda verdadera (lavándula officinalis), símbolo de virtud y serenidad, perfumaba los templos egipcios y se utilizaba en la preparación de ungüentos.
Panacea para todo y también se puede utilizar pura.
Información de divulgación:
Según el Ministerio de Sanidad tiene un efecto relajante favoreciendo el sueño y aliviando los síntomas del estrés. Ayuda a restaurar el estado de ánimo normal. Tiene funciones digestivas y carminativas.
En aromaterapia se considera menos potente que otros aceites esenciales de la misma familia (como el Tomillo o el Romero) a nivel antiséptico pero añade un componente antiinflamatorio y anticongestivo. Excelente analgésico, actúa inmediatamente sobre los dolores de cabeza y puede utilizarse para los dolores musculoesqueléticos.
Los aromaterapeutas creen que funciona bien en el síndrome premenstrual y la premenopausia.
Los naturópatas lo recomiendan ya que contribuye a la regeneración celular, descongestionando la piel y las mucosas; es útil si se aplica mediante compresas, en presencia de micosis, eczema, psoriasis, caspa. La lavanda es perfecta para las quemaduras solares del verano. Gracias a sus propiedades antisépticas y analgésicas, el aceite esencial de lavanda hidrata profundamente la piel, aliviando el ardor y evitando la formación de dolorosas ampollas, favoreciendo así una rápida curación.
Se ha observado que su aplicación en caso de picadura de insecto puede aliviar inmediatamente el picor y la hinchazón.
Excelente para purificar el aliento y la boca.
Al estar casi libre de alcanfor, no tiene ese olor picante y a veces molesto a lavanda comúnmente en el mercado, esto realza sus tonos dulces y delicados haciéndolo muy agradable en la cocina, pruébalo en la versión spray esencial
Sirve para reequilibrar el sistema nervioso, conteniendo el exceso de emocionalidad, favoreciendo el sueño, frenando la melancolía y liberando de la apatía.
Actúa sobre el sistema nervioso como calmante y es muy útil contra el insomnio (a diferencia lavanda híbrida al que erróneamente se le atribuyen los mismos efectos sedantes al contener alcanfor, un estimulante). En psicoaromaterapia se utiliza para traer paz, calma y un mensaje de ayuda.
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